sábado, 7 de agosto de 2010

Capitulo 3, la visita

Bueno llevo mala tres días, Lorena vino ayer a ver cómo estaba, estaba un poco mejor, pero hoy tampoco podría ir.
Es por la tarde, así que estoy un poco aburrida, todo lo que ponen a esta hora en la tele es taan aburrido.
Llaman a la puerta, pasa un rato hasta que alguien llama a la puerta de mi cuarto, es Javier.

Hola, -dice Javier-

Hola!, no sabía que sabías donde vivía –digo en plan trabalenguas, aunque sin duda Lorena se lo había dicho-

Bueno –aquí pareció avergonzado- se lo pregunté a Lorena y ella me lo dijo.
-sospechas confirmadas-

Bueno, gracias por venir –digo alegremente- la verdad es que me aburría –le guiño un ojo-

-sonríe- bueno, es que como no venías a clase se te echaba de menos, así que me dije a mí mismo, vamos a visitarla.-dice Javier-

Bueno, ha ocurrido algo interesante en el instituto?–le pregunto-

Pues la verdad es que no, solo ocurrió algún cotilleo de los que me entero por Lorena –se ríe-

¿Si?, alguno interesante?

Bueno, es poca cosa, lo único que pasó así, más escandaloso fue la pelea que tuvo una pareja.

¿Quiénes? –temí conocer la respuesta-

Pues Marta y Raúl, ella le gritaba a él, que nunca tenía ningún detalle con ella ni nada. –aquí se paró al ver el gesto de dolor que hice, no lo pude aguantar-em, por dónde iba, ah si, así que ella cortó con Raúl, y ahora hay un montón de cotilleos sobre eso.-dijo Javier observándome por si hacía otro gesto parecido-

Ah, pues vaya –murmuré-

Lo conoces, ¿verdad? –me mira

Si…y a ella también,-digo-

Dime, que te pasó.-me dice un poco preocupado-

Verás, yo…yo…yo estaba saliendo con Raúl, pero cuando estábamos saliendo…él…él estaba saliendo con Marta a mis espaldas…no se atrevió a decirme nada a la cara, además, yo estaba súper conmocionada, pues Marta era mi mejor amiga-hice una pausa, y respiré hondo- así que corté con Raúl, y al día siguiente ya estaba saliendo con Marta, esto pasó hace tres meses mas o menos…-no me atrevo ni a parpadear, pues tengo la vista nublosa por las lágrimas contenidas, pero sé que Javier me mira-

¡Qué putada! –dice exasperado- Claudia, esa no era una buena amiga…-siguió diciendo algo, pero en ese momento se me escaparon las lágrimas, yo ya sabía que cuando empezaba, no podía parar. Para mi sorpresa, Javier me llevó cerca de él-
Claudia, venga no llores, no te preocupes, todo pasa, es lo que, sobre todo debes pensar, él no era un buen chico para ti, y ella no era tampoco una buena amiga que digamos.

Ya…pero es que…yo le quería-balbuceo- y cada mañana, los veo delante mía, allí, besándose, y yo…no puedo más…

-me acaricia el pelo, hasta que se me pasa un poco- venga Claudia, mírame, han perdido los dos a una buena amiga por un novio, y tú –dijo mirándome a los ojos- no debes seguir en el pasado. Te lo digo por experiencia.-me da un abrazo, que se lo devuelvo instantáneamente-no te preocupes mas…

Gracias Javier.-es lo único que se me ocurre decir-

-él nota que estoy exhausta, así que me ayuda a tumbarme en la cama-

Adios Claudia, nos vemos mañana. –se despide-

Adios.



Al día, siguiente, estoy por fin mejor, así que voy al instituto. Para mi sorpresa, Lorena está esperándome en la puerta de mi casa.

Hola perdida! –me dice nada más verme-

Hola, -digo bastante contenta

Llegamos a clase, y de reojo, veo que Raúl me mira intensamente y me sonríe. No, por favor, otra vez como la primera vez…

Me siento en mi sitio, y veo que Javier ha visto lo que ha pasado nada mas entrar y me mira un poco preocupado.

Hola –digo, emocionada por que se preocupe por mí-

Hola, ¿Cómo estas? –me pregunta-

Bastante mejor. Aquí se acabó la conversación, pues entró el profesor.

Cuando el profesor empieza a dar la clase, cojo un papel en blanco y escribo:

“Gracias por quedarte ayer conmigo cuando empecé a llorar y por consolarme”
-le paso el papel a Javier-

“No te preocupes, me alegra mucho que estés mejor de todo, si me necesitas algún día solo tienes que llamarme, de acuerdo?”
-escribe eso y me lo pasa-

“Ok, creo, que, gracias a ti, lo estoy empezando a superar, con tu ayuda, te debo una.” –le paso el papel-

-tarda un rato en pasármela, pues el profesor nos está mirando-
“Cuando quieras”

“Mmm suena interesante –escribo- por cierto, responde y ya lo dejamos que el profesor se está mosqueando”
Le paso la nota mirando de reojo al profesor.

“Pues, una tarde de patinaje, me paso hoy por tu casa a las 6?
-En vez de escribir más, me giro hacia atrás, sonriendo, y asiento con la cabeza, él me sonríe feliz en respuesta.


Acaban las clases, y nos vamos juntos hacia nuestras casas, él me pregunta:
Por cierto, tienes patines no? –pregunta, parece que no se había dado cuenta de ese detalle-

Oh, claro, pero no patino muy bien que digamos…-respondo-

No te preocupes, te ayudaré –dice muy seguro de sí mismo-

Ok, te creo.-le digo riéndome- bueno, me tengo que ir ya, que si no, mi madre se preocupa, adios –le guiño un ojo-

Vale, adios Claudia, nos vemos luego a las 7. –se gira y se va-.

La verdad, estoy muy feliz, hace tiempo que no me arreglo para algo especial, y ya lo necesitaba, aunque reconozco que estoy un poco preocupada por lo de patinar, pero sé que Javier me ayudará. Me doy cuenta, de que por fin, tengo un buen amigo en el que puedo confiar.

2 comentarios:

Grecia B. dijo...

Andaa !!! Javier es lindo !!
Que buen capitulo !!

Porfin un poco de felicidad para ellaa !!
:D

sexygirl dijo...

si